protesta loca:
síntomas del derecho a la locura
protesta loca: síntomas del derecho a la locura es una serie de interpretaciones escultóricas de mantas de protesta que articula una crítica al cuerdismo y al capacitismo como formaciones ideológicas al servicio de la reproducción del capital. El proyecto se sitúa en la intersección entre la práctica textil feminista y la lucha por la justicia en salud mental, transformando el lenguaje visual de la protesta política en objetos textiles que funcionan simultáneamente como denuncia, memoria colectiva y reivindicación del derecho a la neurodivergencia.
Cada pieza incorpora frases poéticas de tono político que funcionan como manifiestos, invitando a la reflexión sobre las violencias sistémicas que enfrentan las personas locas y/o neurodivergentes bajo las relaciones sociales de producción capitalistas. En el núcleo dialéctico del proyecto se encuentra una contraposición fundamental: la felicidad como producto de la justicia social frente al sufrimiento producido por las estructuras de dominación cuerdista y capacitista inherentes a la acumulación capitalista.
[in]visible
2024
83 x 70 x 60 cm
Blisters, una pastilla, grapas y argollas metálicas.
La noción de discapacidad suele asociarse con limitaciones físicas visibles, como el uso de una silla de ruedas o la presencia de un aparato auditivo. Sin embargo, existe un vasto espectro de discapacidades invisibles—enfermedades crónicas, trastornos neurológicos o psicosociales, entre otros—que afectan profundamente la vida de quienes las experimentan.
Una afectación frecuente es la minimización o negación de la misma debido a la ignorancia y estigmatización. Frente a estas, la pieza retoma la noción de la vestimenta como medio de expresión de la identidad para mostrar tan sólo uno de los aspectos ocultos de la discapacidad: la toma regular de fármacos, representado en el desperdicio plástico (blisters) que la artista reunió durante 9 meses.
La pieza invita a reflexionar sobre la tarea urgente de socializar, divulgar e investigar sobre las discapacidades invisibles, en un esfuerzo por una sociedad más inclusiva.
síntomas
2025
60 x 75 cm
Banderín hecho con técnica de quilting.
síntomas emplea la técnica del quilting para articular una declaración programática sobre la neurodivergencia y las categorías diagnósticas del capitalismo contemporáneo. La frase "yo no tengo síntomas / yo soy síntoma de algo" invierte la lógica patologizante que localiza el "problema" en el individuo para señalar las condiciones materiales que producen lo que el sistema médico-psiquiátrico clasifica como "disfuncional".
el costo de la sobreestimulación
2024
30 x 16 cm
Bordado y encaje sobre tela.
no puedo con todo
2024
22 x 15 cm
Bordado y encaje sobre tela.
contra la belleza
2025
120 x 80 cm
Quilting, appliqué y bordado.
Este quilt se plantea como un manifiesto textil que interroga los dispositivos de poder inherentes a los cánones estéticos contemporáneos. Lejos de celebrar la belleza como valor universal, la obra la expone como constructo ideológico que administra el acceso a la dignidad humana. Ejecutada en una paleta de rosados, la pieza oscila entre la ternura cromática y la provocación para reflexionar sobre los mecanismos de exclusión social que operan bajo el velo de la apreciación estética.
La obra se inscribe en una tradición crítica que conecta con los planteamientos de teóricas feministas como Naomi Wolf y su análisis del "mito de la belleza", así como con la teoría de Daniel Hammermesh sobre la belleza como capital económico. Desde esta perspectiva, se revela cómo los cánones estéticos funcionan como tecnologías biopolíticas de clasificación y exclusión social.